Dormir acompañado, dormir solo o recostarte sobre tu cama siempre será una experiencia única. Hoy, en el Día Mundial del Sueño queremos que sepas un poco más sobre este día.
La iniciativa fue impulsada por la Asociación Mundial de Medicina del Sueño (en inglés WASM: World Association of Sleep Medicine) y otras organizaciones en el 2008. Según la información compartida en el sitio web de la Asociación, sobre su finalidad: “Pretende ser una celebración del sueño y un llamado a la acción sobre cuestiones importantes relacionadas con el sueño, incluida la medicina, la educación, los aspectos sociales y la conducción.(…) Tiene como objetivo reducir la carga de los problemas del sueño en la sociedad mediante una mejor prevención y gestión de los trastornos del sueño”.
La fecha se celebra el viernes anterior al equinoccio de primavera en el hemisferio Norte, mientras que otoño en el hemisferio Sur y se conmemora en 88 países del mundo.
Duermes mal ¿Qué puede pasar?
La falta de sueño trae como consecuencia daños irreparables a la salud y la calidad de vida de las personas, afectando a un alto porcentaje de la población a nivel mundial. A continuación mencionamos los principales tipos de trastornos del sueño:
Apnea del Sueño: patrones anormales en la respiración durante la etapa de sueño, interrumpiendo el sueño profundo.
Insomnio: dificultad para conciliar el sueño o permanecer dormido.
Narcolepsia: somnolencia extrema o trastorno crónico del sueño durante el día.
Síndrome de las piernas inquietas o enfermedad de Willis-Ekbom: impulso de movilizar las piernas al tratar de dormir, así como sensaciones de hormigueo, ardor y comezón.
Cantidad, no es lo mismo que calidad en el sueño
Las personas deben tomar conciencia acerca de la importancia en la importancia en la calidad de su sueño y las implicancia que puede tener en su salud física y mental.
Por lo que compartimos algunos síntomas o consecuencias que puede generar la falta de sueño en tu cuerpo:
- Cambios de humor.
- Incremento de los niveles de azúcar (diabetes).
- Aumento de la presión arterial e inflamación, que pueden generar enfermedades del corazón.
- Obesidad.
- Debilidad del sistema inmunitario.
- Ansiedad.
- Depresión.