Con la llegada del verano vienen las altas temperaturas y con ellas, noches más calurosas que puede ser un verdadero dolor de cabeza para las personas que padecen de algún trastorno del sueño. Entonces, qué hacemos para combatir estos tiempos de calor nocturno y lograr el descanso que tu cuerpo tanto necesita.
Según los especialistas la temperatura ambiente ideal para dormir es entre los 18° a los 20°C. pero en esta época del año puede sobrepasar esas cifras, siendo uno de los indicadores del por qué nos damos tantas vueltas en la cama. Una solución rápida a este problema es refrescar tu dormitorio antes de dormir, es decir, abrir las ventanas, usar ventilador, aire acondicionado o enfriadores de aire.
Para los más calurosos les recomendamos que antes de dormir tomen una ducha de agua tibia para que te relajes, además de nivelar tu temperatura corporal. Evita las duchas heladas ya que hacen que tu cuerpo produzca más calor.
También, puedes conseguir un colchón que posea lo último en tecnología de ventilación (canales de aireación), ya que te ayudará a regular de mejor manera el calor que irradia tu organismo y así lograr un sueño profundo. Ejemplos de colchones:
